Para dicho descubrimiento, ella que mide tanto su abultada agenda, no pudo dejar un hueco para el día siguiente, día en que se cumplía el primer aniversario de la desidia institucional ante las víctimas, ante los homenajeados.
Las víctimas y sus representantes no pudieron ser invitados, perdón algunas víctimas y representantes institucionales si que fueron invitados personalmente por nuestra alcaldesa.
Bien lo importante es que ya existe un hito arquitectónico y escultural en un destacado y visible lugar cercano al punto del catastrófico y detestable día.
Hoy 4 de junio de 2007, un año y un día después me acerco al Parque de la estación de Jesús, lugar en el que indicaban que se había instalado el modesto y sentido monolito.
Junto a la zona de columpios, en un pasillo de tierra, donde los niños suelen jugar con el balón, junto a la fuente donde algunos dueños, menos educados que sus perros dan de beber a sus mascotas ¿Que veo?

Al verlo de frente se puede leer: En memoria de les victimes de l´accident del metro, 3 juliol 2006.
La verdad es que tienes que acercarte mucho, mas bien parece para el olvido.


Me alejo y al girarme para observarlo se aprecia como destaca.

Me alejo un poco mas y observo que de haberlo puesto entre los arboles de este jardín, también se destacaría y estaría mas protegido.


Para colmo, me cruzo con un vecino que me dice: ¿Que te parece el pipi-can que ha puesto el Ayuntamiento? Vino la alcaldesa a inaugurarlo.
Con todos mis respetos para las víctimas y con toda mi rabia e indignación por las instituciones que les han dado la espalda. Que en otro momento expondré mi opinión.